Dos amigos comentaban algo a este respecto en FaceBook y una de la líneas era: mientras un hombre le grita a la mujer, hay otro queriendo susurrarle al oido..
Parece increible que en esta época, pleno siglo XXI, nuestra sociedad se mantenga tan primitiva como en la época de las cavernas y que aún hayan mujeres víctimas de abusos físicos, verbales y psicológicos, por el solo hecho de ser mujer.
La violencia de género, irracional como cualquier tipo de violencia, no distingue clases sociales, ni idioma, religión o nacionalidad. Todos los días, y en todo el mundo, se dan casos de mujeres que reciben golpizas, maltratos diversos, e incluso son asesinadas porque son mujeres. Esto es, para decirlo de una sola vez, una aberración que no se ha podido erradicar.