Dos amigos comentaban algo a este respecto en FaceBook y una de la líneas era: mientras un hombre le grita a la mujer, hay otro queriendo susurrarle al oido..
Parece increible que en esta época, pleno siglo XXI, nuestra sociedad se mantenga tan primitiva como en la época de las cavernas y que aún hayan mujeres víctimas de abusos físicos, verbales y psicológicos, por el solo hecho de ser mujer.
La violencia de género, irracional como cualquier tipo de violencia, no distingue clases sociales, ni idioma, religión o nacionalidad. Todos los días, y en todo el mundo, se dan casos de mujeres que reciben golpizas, maltratos diversos, e incluso son asesinadas porque son mujeres. Esto es, para decirlo de una sola vez, una aberración que no se ha podido erradicar.
Para comprender un poco más sobre la violencia de género, basta decir que es la violencia ejercida contra la mujer por ser precisamente eso: mujer. Y va muy de la mano con el machismo tan mencionado como una práctica también arcaica, pero que aún prevalece. Por lo general y de manera más frecuente, se da en el hogar, pero también se presenta en el ambiente laboral y educativo.
Esta aberración se presenta desde el noviazgo hasta el matrimonio y los insultos constantes, los golpes para reprimir cualquier intento de respuesta por parte de la mujer y el sometimiento sexual para demostrar quién es el que “lleva las riendas” de la casa, es lo común. Pareciera que el gatillo que dispara esta actitud, además del machismo, es que la mujer ha demostrado que puede conseguir su libertad económica y desempeñar igual o incluso mejor, puestos de trabajo muy bien remunerados que hacen sentir relegado al marido de su papel de jefe indiscutible del hogar.
En muchos paises existen organizaciones reciben denuncias y brindan ayuda legal y sicológica a las víctimas de la violencia de género, lo que ha permitido que las mujeres tengan el valor de dar a conocer su situación sin temor, además de organizaciones internacionales como Naciones Unidas y Amnistía Internacional.
América Latina es una de las regiones que presente un alto índice de violencia de género. Según datos publicados en Prensa Libre en Guatemala a finales de noviembre de 2010, se contabilizaban cerca de 46,000 denuncias, una cifra que de verdad es alarmante.
No hay excusa para actos tan aberrantes como la violencia contra la mujer, pero para poder ayudarlas, es necesario que denuncien los echos. El miedo es el arma principal del cobarde que ejerce la violencia de género. Desgraciadamente esta práctica es aprendida de padres a hijos, no denunciarla significa seguir la cadena de atrocidades contra las mujeres.
Donde presentar las denuncias de violencia de género en Guatemala
Fiscalía de la Mujer y Derechos Humanos
Teléfono:(502) 23315073 y 23312758
10 C. 40-14 Z.1
Guatemala, Guatemala
Página web: www.mp.gob.gt
Defensoria de la mujer:
12 ave. 12-72 Zona 1, Guatemala.
Teléfono: 24241717, CallCenter: 1555
Página web: http://www.pdh.org.gt/index.php?