Ivo es un muchacho de Argentina al que le fue diagnosticado parálisis permanente a causa de una Cuadriparesia, una enfermedad que provoca la disminución de la fuerza motora de los cuatro miembros (ver definición Cuadriparesia en Wikipedia).
Una de las consecuencias de la enfermedad, era la imposibilidad de caminar debido a una parálisis cerebral permanente. En las primeras 23 horas de vida, el destino de Ivor estaba marcado por un ataque y posterior coma. Una de las sugerencias de los médicos, fue la amputación de las terminales nerviosas del pequeño, a costa de dejarlo sin la menor oportunidad de andar.
Lejos que la noticia aplastara cualquier esperanza de su padre, Jorge Cardile, este emprendió la tarea de construir una máquina con la cual su hijo pudiera cambiar su destino. Ya que tenía un taller de mecánica de autos y conocimientos de ingeniería, Jorge Cardile empezó a construir lo que hoy se conoce como el Estimulador de Marcha, una máquina creada a partir de dos esquíes y con un sistema que semeja un escalador con una cinta de correr.