Algo malo debe estar ocurriendo cuando una niña de 13 años se torna en una experta en moda.
Nunca he logrado entender el insípido y superfluo mundo de la moda donde pareciera que las mujeres más valoradas son las que solo tienen pellejo y huesos por la exigencia de los «grandes» diseñadores. En algún punto estamos mal.
Ver caer a una modelo en la pasarela y morir no ha causado ningún revuelo que cambie las cosas, simplemente su anorexia era un problema de ella y no del mundo de la moda. Yo de ingenuo creía que estar esbelto era cuestión de salud, no de moda.