Al igual que nosotros los humanos, los perros en su vejez empiezan a padecer de ciertas dolencias típicas de la edad. Por ejemplo, cuando a nuestras mascotas les empiezan a aparecer canas en sus patas y alrededor de su hocico es una señal que nuestro amigo está empezando a ser un adulto mayor y por lo tanto, debemos estar más pendientes de ellos para darles toda la ayuda y cuidado que se merecen.
Creo que es preciso que tomemos conciencia que nosotros también vamos a envejecer y padecer de limitaciones físicas por el paso de los años. Nuestros amigos caninos necesitarán de cuidados especiales para darles una buena calidad de vida en sus años finales, nos han dado su amor y cariño y creo que es justo que nosotros hagamos todo lo posible porque en la recta final de su vida, esta sea lo más tranquila y placentera posible.
Hay ciertos elementos que influyen en la cantidad de años que un perro vive, entro ellas, el tamaño, la raza, el peso y el tipo de alimentación que le hemos dado. Aquello que «1 año de un perro equivale a 7 de un humano» no es cierto, lo que sí es cierto es que nos guste o no, al envejecer nuestro amigo necesita de toda nuestra ayuda y comprensión.
Algunos síntomas
- Su piel pierde elasticidad y afecta los folículos pilosos. Con ello empiezan a aparecer canas y pérdida de pelo en algunas partes de su cuerpo.
- Con la edad también aparecen problemas como el estreñimiento y pérdida de dientes. Siempre es aconsejable el aseo de los dientes de un perro para evitar el sarro y si esto no se ha hecho, en la edad adulta puede provocar enfermedades en sus dientes y encías.
- Estreñimiento provocado por la disminución de los movimientos del colon.
- La disminución de su actividad física puede generar obesidad.
- Hay una disminución en su capacidad de absorción de calcio lo que se traduce en problemas óseos.
- La falta de ejercicio por la disminución de la actividad física, puede generar problemas cardíacos ya que se engrosan los vasos sanguíneos y las arterias provocado por depósitos de calcio.
- Pueden desarrollar problemas renales que provocan pérdida de peso, degradación de los músculos, mala absorción intestinal y por consiguiente, una reducción en la asimilación de los nutrientes. Al acumularse las proteínas y urea se desarrolla una insuficiencia renal.
- Al igual que el humano, la edad provoca en ellos la llamada vista cansada, pérdida de capacidad auditiva y del sentido del gusto. Con la disminución del sentido del gusto, pueden perder interés en la comida.
Resulta normal que un perro anciano disminuya su actividad física y se vuelva más sedentario, pero es importante comprender que esos cambios de conducta son porque nuestro amigo está padeciendo los efectos de la edad y dejar de prestarle atención solo aumenta su tristeza y puede llegar a convertirse en depresión. Llevar una mascota más joven, solo dañará más a nuestro perro porque ya no es capaz de responder físicamente como lo hacia antes.
Como cuidar a nuestro perro en su vejez
- Antes que nada, debemos llevarlo al veterinario para un examen general que pueda detectar cualquier cambio físico y que entonces, pueda ser tratado a tiempo.
- Prestarle mucha atención, acariciarlo y hablarle. No hay nada peor y más dañino que ignorarlo.
- Cada 6 meses llevarlo a un examen médico para que se le practiquen análisis de laboratorio.
- Cambiar su alimentación por una propia para su edad, existen concentrados específicos para perros gerontes.
- Si en los exámenes se le detecta alguna enfermedad, el alimento y su dieta deberán seguirse estrictamente comprando el alimento que haya prescrito el médico veterinario.
Creo que es importante insistir en que un perro anciano no debería ser problema para nosotros y que su edad JAMÁS debería ser una excusa para ponerlo a dormir. Eso sería una cobardía para un amigo que nos ha dado todo su amor incondicional. Así que primero que nada hay que tener paciencia. Si se está volviendo más sedentario y se queda en algún lugar si moverse mucho, lo mejor será procurarle un lugar blando y acolchado para que descanse. No queremos que por quedarse en un lugar duro empiecen a aparecer callosidades y úlceras.
Cuando se le lleve de paseo, seguro se cansará más rápido. Si lo dejamos suelto, seguro al llamarlo no responderá o lo hará de forma más lenta ya que su sentido de la vista y auditivo han disminuido. No es porque no quiera responder a nuestro llamado y por ello es importante vigilarlo y NUNCA DEJARLO SOLO para que no se pierda ya que puede desorientarse.
Cariño, afecto, atención y paciencia harán que la vida de nuestro gran amigo sea más placentera y tranquila. Si todo transcurre con normalidad en nuestras vidas, nosotros vamos a llegar a viejos también y con los mismos achaques y problemas físicos que nuestra mascota tiene. Entonces hay seamos responsables y lo más importante, mostremos que somos buenos seres humanos que no abandonan a sus amigos.
Un perro anciano necesita mucho de nuestro apoyo y sentirse querido para afrontar su vejez dignamente, igual que tu o yo.
Fuentes:
tuperro.com.mx
perros.facilisimo.com
Imágenes:
wikipedia.org
ga. jennings